Los Juegos Olímpicos de París siguen en pleno desarrollo, y la intensa competencia de tenis de mesa deja a los espectadores sin aliento. Google, incluso, se ha animado a participar, lanzando su primer robot Agent que alcanza el nivel de competencia humana.
El tenis de mesa, un deporte que requiere años de entrenamiento para dominarlo, exige a los jugadores habilidades complejas y una capacidad estratégica en la competición. Esto lo diferencia esencialmente de juegos puramente estratégicos como el ajedrez o el Go.
Por lo tanto, el tenis de mesa se ha convertido en un valioso punto de referencia para medir las capacidades de los robots, poniendo a prueba su velocidad de movimiento, precisión en tiempo real, toma de decisiones estratégicas, diseño del sistema y la competencia directa con oponentes humanos.
Para entrenar a este robot, Google recopiló una gran cantidad de datos sobre el estado del juego de tenis de mesa, incluyendo la posición, velocidad y rotación de la pelota. El robot aprendió de estos datos, dominando habilidades como el golpe de derecha con efecto liftado, la puntería de revés y la recepción del saque.
Primero se entrenó en un entorno simulado que replicaba con precisión las características físicas del tenis de mesa. Posteriormente, el robot se desplegó en el mundo real, recopilando datos de rendimiento a través de partidos contra humanos para mejorar sus habilidades, creando un ciclo de retroalimentación continuo.
Además, Google diseñó el sistema para que se adaptara a diferentes oponentes al rastrear su comportamiento y estilo de juego. Esto permite al robot probar diferentes habilidades, monitorear su tasa de éxito y ajustar su estrategia en tiempo real.
Para evaluar el nivel de habilidad del robot, Google lo enfrentó a 29 jugadores de tenis de mesa con diferentes niveles de habilidad en partidos competitivos. Los resultados mostraron que el robot ganó el 45% de los partidos y el 46% de los juegos contra todos los oponentes. Ganó todos los partidos contra principiantes, pero perdió todos los partidos contra jugadores avanzados y de nivel avanzado+. Esto indica que el robot alcanzó un nivel humano intermedio en partidos prolongados.
Los usuarios que probaron el robot dieron excelentes valoraciones a la experiencia de jugar contra él, describiéndola como divertida y atractiva, independientemente de su nivel de habilidad. Dijeron que jugarían de nuevo contra el robot. Aunque los jugadores avanzados pudieron aprovechar las debilidades de la estrategia del robot, disfrutaron de la competición y vieron el potencial del robot como un compañero de entrenamiento más dinámico.
A pesar de algunas limitaciones, como la velocidad de reacción, la capacidad de detección de la cámara, el manejo de la rotación y la goma de la pala, el rendimiento innovador del robot en el tenis de mesa es notable. La aparición del robot Agent de Google no solo aporta nueva vitalidad al tenis de mesa, sino que también abre nuevas posibilidades para el desarrollo de la robótica.
Página principal del proyecto: https://sites.google.com/view/competitive-robot-table-tennis/home