Según informó AIbase, la Unión Europea señaló claramente el viernes que se mantendrá en el calendario establecido para su legislación histórica sobre inteligencia artificial, rechazando así la campaña conjunta de más de cien empresas tecnológicas globales, incluidas Alphabet, Meta, Mistral AI y ASML, para retrasar la Ley de Inteligencia Artificial. Estos gigantes tecnológicos habían afirmado anteriormente que retrasar la implementación afectaría la competitividad de Europa en el rápido desarrollo del campo de la inteligencia artificial.
El portavoz de la Comisión Europea, Thomas Renier, respondió con firmeza, diciendo: "Sí he visto muchos informes, cartas y comentarios sobre la Ley de Inteligencia Artificial. Permítanme ser lo más claro posible: esta ley no está paralizada, no tiene período de gracia ni suspensión".
La Ley de Inteligencia Artificial es un marco regulatorio basado en el riesgo, que clasifica claramente las aplicaciones de inteligencia artificial. Prohíbe completamente unos pocos casos "de riesgo inaceptable", como la manipulación conductual o la calificación social. Además, la ley define una serie de usos "de alto riesgo", incluidas las aplicaciones de reconocimiento biométrico y facial, así como las de inteligencia artificial utilizadas en campos como la educación y el empleo. Para las aplicaciones "de alto riesgo", los desarrolladores deben registrar sus sistemas y cumplir con obligaciones de gestión de riesgos y calidad para poder ingresar al mercado europeo. Para aplicaciones de inteligencia artificial consideradas de "riesgo limitado", como los chatbots, se requieren menos obligaciones de transparencia.
La Unión Europea comenzó a implementar gradualmente la Ley de Inteligencia Artificial el año pasado, y sus reglas completas entrarán en vigor a mediados de 2026.