Daniel Francis, quien inesperadamente obtuvo un trabajo al hacerse pasar por un empleado despedido de Twitter, ahora se ha convertido en el fundador de una empresa emergente de IA policial. Su empresa, Abel, se dedica a utilizar la inteligencia artificial para ayudar a los policías a completar informes, ahorrando así recursos policiales.
Durante una investigación, Francis acompañó a un oficial de policía en un patrullaje. En una emocionante persecución, fue testigo de la gran cantidad de tiempo y esfuerzo que los policías dedican a rellenar informes, lo que le impactó profundamente. Se dio cuenta de que la inteligencia artificial podía desempeñar un papel crucial en este aspecto.
Francis fundó Abel y desarrolló un sistema de IA que puede generar automáticamente informes policiales analizando videos de cámaras corporales y datos de llamadas de despacho. Se sabe que el sistema Abel ya se está utilizando en el departamento de policía de Richmond, California, y ha recibido comentarios positivos. Los agentes han informado que, al utilizar el sistema Abel, pueden ahorrar el tiempo dedicado a la redacción de informes y concentrarse en tareas policiales más importantes.
Francis afirma que espera que Abel pueda aliviar la carga administrativa de los policías, permitiéndoles dedicar más tiempo y energía a proteger la seguridad de la comunidad.
Abel ha recibido 5 millones de dólares en una ronda semilla de financiación, liderada por Day One Ventures, con la participación de Long Journey Ventures y Y Combinator. Francis planea utilizar estos fondos para seguir mejorando el sistema Abel y expandirlo a más departamentos de policía en diversas regiones.
Cabe destacar que Abel no es la única empresa que se dedica al desarrollo de sistemas de informes policiales con IA. Varias compañías, incluyendo Axon, fabricante de pistolas Taser y cámaras corporales, están desarrollando productos similares. Francis cree que, con el desarrollo continuo de la inteligencia artificial, el trabajo policial será más eficiente e inteligente.
