Hace unos días, la Unión de Editores Independientes presentó una denuncia antimonopolio ante la Comisión Europea, acusando a Google de su nueva función de resúmenes de IA en su motor de búsqueda. Según un informe de Reuters, la denuncia acusa a Google de "abuso del contenido de Internet", causando pérdidas significativas a los editores, especialmente a los medios de comunicación, incluyendo una caída en el tráfico, lectores y ingresos.
Desde que Google agregó resúmenes generados por IA en la parte superior de los resultados de búsqueda el año pasado, la expansión de esta función parece no haber sido bien recibida como se esperaba. Aunque Google afirma que estos resúmenes de IA pueden ayudar a los usuarios a formular mejores preguntas, creando así nuevas oportunidades para conteniendo y negocios, los editores expresaron una fuerte descontento. Consideran que no tienen opción de rechazar que sus contenidos sean utilizados para resúmenes de IA, a menos que decidan completamente salir de los resultados de búsqueda de Google.
En la denuncia, los editores destacaron que las prácticas de Google no solo debilitan su presencia en línea, sino que también afectan directamente a sus modelos de ingresos. La respuesta de Google fue bastante ligera, indicando que las acusaciones sobre el tráfico en Internet a menudo se basan en datos incompletos y señalando que las fluctuaciones en el tráfico de sitios web pueden deberse a múltiples factores, y no solo a la existencia de resúmenes de IA.
Este incidente nuevamente ha generado atención pública sobre cómo las grandes empresas tecnológicas utilizan contenido y datos. No es claro si Google hará cambios bajo presión o continuará impulsando sus funciones de IA. Sea como sea, este conflicto entre la tecnología de IA y la industria editorial tradicional está destinado a generar debate durante los próximos meses.